Después del paso del huracán Iota en noviembre de 2020 diferentes habitas como el bosque seco y el manglar se vieron gravemente afectados y destruidos en su gran parte, poniendo en peligro de extinción a las especies que allí habitan.

La expedición Cangrejo Negro por Providencia, adelantada por investigadores de los Institutos Humboldt y Sinchi, en especial en las zonas aledañas al embalse Fresh Water Bay, indicaron que los reptiles y anfibios cuentan con una alta capacidad de resiliencia, en medio de la búsqueda se encontraron con varios anfibios que habitaban en esa zona y que están cumpliendo con su tarea de reproducción.

“Tan solo en una rama identificamos hasta cinco lagartos. Estos reptiles, con tamaños entre los cinco y 10 centímetros, cuentan con una población abundante en la isla”, agregó Andrés Acosta, el lagarto negro (Ameiva fuliginosa). “Vimos uno durante el día camuflado entre los escombros. Este reptil, que en la isla le dicen lisa, es subterráneo y hace cuevas en los escombros”, precisó el experto del Humboldt.

Tomado de: El Espectador

Editado por: Nickole Gomez

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